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Sardinas marinadas con verdurasprint

preparacion prep. 25 m. cocinado cocin. 0 m. raciones nº de rac. 4
Sardinas marinadas con verduras

ingredientes

  • Sardinas pequeñas
  • Aceite de girasol
  • Aceite de oliva
  • Tabasco
  • Tostadas pequeñas

Para la marinada:

  • 160 ml de vinagre de vino blanco
  • 1 litro de agua
  • 20 g de sal

 

ingredientes

Para el relleno de las sardinas:

  • 1 bote pequeño de huevas de arenque
  • 1 zanahoria pequeña
  • 1 ramita de apio
  • 1 chalota
  • cebollino
  • 1-2 tomates pera
  • Sal
  • Aceite de oliva

preparación

  1. Sardinas: preparar o comprar las sardinas en lomos, libres de espinas.

  2. Congelar: las sardinas durante 5 días a -20° El pescado lo vamos a consumir crudo.

  3. Descongelar: las sardinas en la nevera el día que vayamos a consumirlas.

  4. Extremar: la higiene en la preparación de la receta.

  5. Mezclar: el agua, el vinagre y la sal, y marinar las sardinas en esta mezcla durante 15 minutos.

  6. Escurrir: las sardinas y conservar en una mezcla de aceite de girasol y de aceite de oliva.

  7. Cortar: muy finas las verduras, la chalota y el cebollino.

  8. Mezclar: las huevas de arenque con las verduras, salar y aliñar con unas gotas de aceite. Reservar.

  9. Pelar: los tomates, retirar las pepitas y cortar muy fino. Dejar en un colador hasta el momento de utilizarlos para que pierdan el agua.

  10. Hacer: rulos con los lomos de las sardinas y colocarlos en vertical en la fuente de servir.

  11. Rellenar: los lomos de sardina con las verduras y el tomate, y agregar 3 gotas de Tabasco.

  12. Servir: acompañado de unas tostadas de pan.

 

observaciones

Este plato requiere un poco de trabajo, pero resultará un éxito por su sabor y presentación. Es ideal para servir como aperitivo o acompañamiento. Al tratarse de una preparación en crudo, es fundamental congelar previamente las sardinas durante un mínimo de 5 días a -20 °C en un congelador doméstico de tres o cuatro estrellas. Esto es necesario para eliminar el riesgo de anisakis y garantizar la seguridad alimentaria, incluso si las sardinas son pequeñas.

Las sardinas, como todo pescado azul, son ricas en ácidos grasos omega-3, que ayudan a reducir los niveles de colesterol. No deberían faltar en nuestra dieta habitual.