Retirar: la piel a los muslos de pollo (opcional).
Salpimentar: y espolvorear con las hierbas aromáticas.
Aliñar: con aceite y regar con el vino los muslos de pollo.
Reservar: en la nevera hasta el momento de cocinar.
Precalentar: el horno a 150 ºC.
Colocar: los muslos de pollo en una bandeja e introducirla en el horno durante 15 minutos.
Cocer: las patatas y los boniatos en el microondas hasta que estén blandos.
Pelar: las cebollas y cortar en 2 trozos.
Partir: los tomates cherry por la mitad.
Pelar: los dientes de ajo, chafarlos y añadirlos a la bandeja del horno.
Aumentar: la temperatura a 180 ºC y dejar que se cocine.
Añadir: más vino si precisa.
Hacer: un puré con las patatas y los boniatos por separado.
Aliñar: con aceite, salar y espolvorear con nuez moscada rallada.
Emplatar: los muslos de pollo con las cebollas y los tomates, y verter la salsa por encima.
Montar: con la ayuda de un aro de cocina los dos purés y añadir como acompañamiento.
Servir: caliente.
La mezcla del dulzor del boniato y la suavidad del puré de patatas resulta un acompañamiento excelente para este plato. Las patatas y los boniatos se pueden hervir si no disponemos de microondas, aunque cocinarlos en el microondas nos ahorrará tiempo y trabajo. Un prensador de patatas facilitará mucho la tarea de preparar los purés; si no forma parte de vuestro utillaje, os animo a que lo adquiráis.
Yo tengo por costumbre retirar la piel del pollo para reducir las grasas. Los muslos suelo comprarlos ya preparados para hacer a la plancha, y así reduzco los tiempos de cocción.